miércoles, 22 de julio de 2015

Asociación Rural de Henderson

Los orígenes y el presente de la situación agropecuaria Argentina

La larga lucha que emprendimos en 2008 sirvió para parar, lo que era un atropello más, de un gobierno cuya única política para el sector, era el hostigamiento. La 125 era una gran gota para un vaso que ya estaba lleno. Nos volcamos a las rutas y provocamos la ira de todos los funcionarios, llevándolos a agredirnos de manera tal, que la mayor parte de la ciudadanía se volcó a nuestro favor, como nunca antes se había visto.

Se produjeron manifestaciones que quedaran en la historia, como la de rosario en el monumento a la bandera y la de capital federal en el monumento de los españoles. Cientos de miles de personas unidas, poniéndole límites a un gobierno que se mostraba abiertamente autoritario y violento, D`Elia pegándole a productores en plaza de mayo, De Angeli preso por gendarmería, sindicatos, ahora opositores, pegándole a productores y haciendo contra piquetes en las rutas. Superamos todo eso, nos mantuvimos unidos y al fin logramos el objetivo, Cobos dio el “no positivo” , el campo había ganado, demostramos que el autoritarismo no era lo que queríamos para nuestro país, fuimos la chispa que motivo a miles a decir basta.

Luego, el peor error, creernos ganadores y subestimar a un gobierno lleno de odio y con una sed voraz de venganza. Los líderes de las gremiales, mareados por su repentina popularidad, se metieron en la política, un juego para el que no estaban preparados. Los productores, cansados luego de tantos meses de lucha, volvimos a nuestra rutina. La ola produjo la primer derrota legislativa del kirchnerismo en el año 2009, a manos del señor De Narvaez, el campo era fuente de consulta y casi que los políticos buscaban nuestra aprobación.

El gobierno, como en todas sus derrotas, mostro su cara más agresiva, lanza una batería de medidas y políticas, estilo ley de medios, que nos corren totalmente de escena. El sector, se encontraba en un descanso, luego de una aparente victoria, y no supo reaccionar, era demasiado tarde, nuestra relajación post voto “no positivo” fue un error que íbamos a pagar muy caro.

Chocarnos con la realidad fue un golpe tremendo, habíamos hecho un esfuerzo enorme, creímos tener todo controlado, pero en verdad, no habíamos conseguido nada, volvíamos a la situación pre 125, que era de por sí muy mala. El gobierno impuso el relato de que con la 125 de lado, no teníamos de que quejarnos y no supimos como librarnos de eso. El apoyo de la sociedad, así como nuestras esperanzas de que habíamos logrado cambiar las cosas, se esfumaron rápidamente.

Ya sin poder y fracturado, el sector, fue blanco fácil del gobierno, que nos hizo saber cada vez que pudo, que nosotros éramos parias. Aumentos de impuestos, ROES y el asedio de AFIP fueron algunos de los castigos que se nos impusieron.

Hoy, la situación es mucho peor, arriba de las retenciones, sufrimos una presión impositiva record y ya vemos con tristeza como muchos productores se están descapitalizando. Pero esto no representa la victoria del gobierno, la victoria del gobierno es nuestra realidad hoy, un sector atomizado, sin capacidad de respuesta, productores entregados y resignados, que mantienen la cabeza gacha ante cualquier barbaridad a la que sean sometidos.

Por último y a título personal solo quiero pedir que hagamos, cada uno, un análisis introspectivo, y tratemos de recordar cuales fueron los motivos que nos hicieron salir de nuestras casas, dejar nuestras actividades y juntarnos para salir a reclamar. Hoy la situación es apremiante, porque más allá de la falta de rentabilidad y el quebranto al que nos deja expuestos, lo que está en juego es nuestro estilo de vida, el del interior, y creo que por nuestro presente y por el futuro, que abarca a las generaciones venideras, debemos hacer algo para defenderlo.

No sé si vamos a cambiar algo, pero me quedo más tranquilo intentando. Este país se merece algo mejor, y particularmente los productores y toda la gente que vive del campo, que tanto se esfuerzan y tanto dejan en la actividad productiva.

Estamos frente a una nueva elección, no podemos mostrarnos como un sector con el que se puede hacer lo que sea. El nuevo gobierno debe saber que queremos ser tratados como lo que somos, el sector más importante y más eficiente del país.

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